Además, el Sindicato (en referencia a SATSE) ha conseguido que se atienda, al menos parcialmente, su reclamación del reconocimiento del derecho de compensación por la continuidad asistencial, el conocido como ‘solape’ de los turnos sobre todo en los centros hospitalarios, donde el profesional tiene que alargar unos minutos su jornada para transmitir las novedades al que entra sobre los pacientes.
De este modo, se iniciará en 2013 una experiencia piloto que permita evaluar los efectos presupuestarios y organizativos de esta compensación con su implantación en las unidades de Medicina Interna, Oncología, Hematología y en una unidad de cirugía de cada hospital. Sáez Aguado ha puntualizado que la compensación se establecerá en reducciones de la jornada anual o días de descanso, que se cifrarán “en el entorno de dos días a disfrutar en determinadas situaciones”.
Una vez evaluada la experiencia durante los seis primeros meses de 2013 la Consejería trasladará “lo antes posible” una propuesta general a la Mesa Sectorial.
De este modo, se iniciará en 2013 una experiencia piloto que permita evaluar los efectos presupuestarios y organizativos de esta compensación con su implantación en las unidades de Medicina Interna, Oncología, Hematología y en una unidad de cirugía de cada hospital. Sáez Aguado ha puntualizado que la compensación se establecerá en reducciones de la jornada anual o días de descanso, que se cifrarán “en el entorno de dos días a disfrutar en determinadas situaciones”.
Una vez evaluada la experiencia durante los seis primeros meses de 2013 la Consejería trasladará “lo antes posible” una propuesta general a la Mesa Sectorial.
Esto es lo que hemos conseguido entre todos, por no exigirlo en su momento.
La propuesta o alternativa a esta situación no puede ser otra que solicitar, quienes trabajan "a turno", cambio de jornada a turnos fijos diurnos, para "cumplir" el horario de trabajo "ampliando" la jornada en 30 minutos todos los días, de lunes a viernes.
Esto es lo único que podemos hacer quienes nos vemos obligado a tener que entrar antes de la hora y salir después, además de la presión del tiempo y del horario, por llegar a un relevo adecuado.
Las Administraciones sanitarias se lo han buscado.
Porque otra alternativa no puede ser que entrar por la Institución a la hora exacta y salir una vez cumplido el horario establecido: de 8 a 15 hora, ni un minuto más; de 15 a 22 horas, ni un minuto más; y de 22 a 8 horas, ni un minto más.
Esas dos serán las propuestas más lógica ante la falta de reconocimiento de las Administraciones, pero no sólo por la situación actual, sino porque, además, no se nos quiere reconocer algo que venimos haciendo; mientras los demás no trabajan con esa presión y precisión horaria.