Vamos a aclarar lo que pretendemos expresar con el título de este artículo; luego reproduciremos las declaraciones que hace la Presidencia del Consejo General de la Profesión Enfemrero, terminando con la exposición de algunos datos referidos a la legalidad vigente hasta que se aplique la nueva estructura universitaria.
Decimos que hemos bajado de nivel por lo siguiente: hasta la fecha, los estudios universitarios se estructuran en tres Ciclos: Deplomado, Licenciado y Doctor; con la nueva regulación es cierto que se establecen esos tres ciclos, pero, sin embargo, se crean dos tipos de Grados, los que tienen una carga lectiva de 240 créditos o inferior, y aquellos que están por encima de ese número de créditos. En consecuencia, la diplomatura en Enfermería, a la hora de clasificarla dentro de esos ciclos, en función del número de créditos que le pretenden asignar, máximo de 24o créditos, será un título de Grado de nivel inferior, ya que existirán otros Grados, precisamente para aquellas titulaciones que han venido denominándose como Licenciaturas, Ingeniería o Arquitectura. Luego, lo que pretende vendernos el Presidente de la Organización Colegial de nuestra Profesión es algo peor que humo: simplemente es mentira. Veamos a continuación las declaraciones que ha hecho en determinados ambientes:
Sí, el Presidente del Consejo General de la Profesióndice que se ha conseguido un "hito histórico", la "licenciatura" en Enfermería, cuando esto ni es un "hito" ni es "histórico", ni es, ¡por supuesto!, una Licenciatura, entre otros motivos porque las licenciaturas han dejado de existir "formalmente"; queremos decir que los títulos de las Universidades ahora se denominaran de Grado, Master y Doctor; es decir, lo mismo que antes pero con otro nombre. Esto que dice el Presidente del Consejo General de haber conseguido una "licenciatura" no es otra cosa que una tomadura de pelo, puesto que seguimos siendo unos estudios del último nivel universitario, ya que si bien el primer ciclo pasa a denominarse de Grado, lo cierto es que dentro de esos Grados existirán los que contengan créditos de 300 o más, y aquellos otros Grados de 240 créditos o menos; es decir, un Grado de cuarto nivel.
El problema es de puro ahorro económico. Ustedes tienen que hacer cuentas, y tienen que saber que las Universidades pagan a los Profesores en función del número de horas que imparten; y ese número de horas está en función de la cantidad de ellas que figuren en los correspondientes planes de estudio. Así, tantas horas tantos Profesores. Otra cosa será la cantidad de contenido a estudiar, pero esto, ¡por desgracia!, no es lo que cuenta a la hora de expedir un título. Aquí lo que realmente cuenta es el número de créditos que figuran en los correspondientes Planes de estudio.
Los futurios Planes de estudio contendrán menos créditos que ya previera aquel Real Decreto 1497/1987, de noviembre, y 150 créditos menos que el Real Decreto de Junio de 1994, que prevé 3.900 horas mínimas; o expresado en créditos, 390. Todo es mentira; lo único cierto es que ahora, al parecer, los estudios se cursarán en cuatro años en lugar de en los tres actuales, ya que no es humanamente posible realizar ese mínimo de horas lectivas en los tres años actuales; y, por otra parte, no menos importante es que en la Unión Europea los estudios universitarios comienzas a los 19 años, mientras que en España lo hacen a los 18.
Esto lo saben bien los alumnos, no así los Profesores, ya que para ellos no representan ninguna novedad. Son los alumnos los que están afectados, ya que tienen que aprenderse todo aquello que cada profesor les imparte, que, por lo que sabemos y nos cuenta, dejan bastante que desear, puesto que la impartición de esos contenidos se hace desde la perspectiva de una persona que, además de lo que imparte, tiene otros conocimientos y experiencia de los que un alumno carece. En definitiva, que como esta Profesión no tiene verdaderos representantes que conozcan el tema, sus participaciones en estos asuntos está tan limitado como sus conocimientos. Porque si no fuera así, mejor será "coger las maletas" y matricularse en una titulación un poco más seria que ésta, porque ya adivinamos los resultados: los que mandan a las Universidades, y los que obedezcan a Cuidar a personas mayores, con un gran inconveniente: que estos establecimientos van a ser empresas privadas, y, ¡ya se sabe!: tienen que ser rentables, y la única forma de que así suceda, será a cuenta de las retribuciones y del horario de trabajo de las Enfermeras. ¡AL TIEMPO!.
